3/6/08

RECUERDOS DE LA GUERRA CIVIL EN SANABRIA

María E. En nuestra comarca sanabresa la guerra civil también se dejó sentir como hemos podido averiguar por medio de gente del pueblo que aún hoy lo recuerdan con tristeza. Existen numerosas anécdotas, entre tantas oídas destacamos algunas: cuentan cómo por las mañanas lo más normal era encontrarse con los guardias en la puerta, esa vigilancia era constante y la gente vivía con ello, los contrarios a las ideas del régimen eran conocidos como "rojos" los cuales andaban escondidos por las montañas sanabresas, eran perseguidos y la mayor parte de ellos murieron por defender sus ideas. Dicen que una frase muy escuchada cuando se hacía de noche y las mujeres volvían de hacer el pan era la siguiente: los guardias armados no sabían quien venía y preguntaban ¿quién viene?, a lo que las mujeres y niños contestaban "gente de paz"; entonces los dejaban pasar; el miedo que le tenían era terrible según nos dicen. A veces cuando que una familia había uno que podía ser "rojo" les llegaban incluso a torturar para saber información acerca de dónde se podía encontrar. Algunas familias los escondían donde podían para que no lo mataran. Dice que uno de éstos conocidos como "rojos" se hizo pasar por un pastor , pero lo detectaron y el hombre se echó al río y se metió debajo de una piedra que hacía el agua cascada lo persiguieron y decían "se echó al río" y así salvó su vida, quedando escondido. Otros la mayoría permanecían escondidos en el monte, sus familias como eran agricultores tenían tierras de labranza y cuando iban le dejaban la comida en ellas, a veces escondidas en el cultivo de centeno, a lo cual no les daba que desconfiar puesto que la comida la llevaban para todo el día en el campo, el huido sabía qué tierra tenía para segar y por la noche la recogía allí.
Por otro lado la escasez de medicamentos, alimentos y ropas era constante, la miseria se apoderó de estos pueblos en estos años, muchos niños de entonces murieron.
Recordar que a fecha actual y paseando por algún bosque cercano al lago de Sanabria con un abuelo nos dice "aquí mataron y enterraron a uno" lo cual recuerda o ha oído contar. Ojalá esto nosotros solo lo recordemos sin vivirlo.